En locales dedicados a la actividad relacionada con la gastronomía, o la alimentación, como son los bares y los restaurantes, deben llevar un exhaustivo control de plagas si no quieren sufrir un descenso de visitantes y por tanto, económico. Las medidas higiénico – sanitarias, deben estar al día para no tener esos daños.
Los locales dedicados al sector de la hostelería, son un imán para las plagas, por el simple hecho de tener una zona de cocina y una despensa donde almacenar la comida, estas dos habitaciones servirán de cobijo y comedor para los insectos. Los clientes, en cuanto visualizan un indicio de plaga, resulta incómodo y desagradable, además de que, no es legal abrir las puertas de nuestro local de hostelería si tenemos una plaga, ya que pueden ofrecernos bacterias a todo aquel que entre en el local.